jueves, 10 de febrero de 2022

And just like that... nos volvemos a despedir de Carrie Bradshaw

Esta reseña/opinión va a contener spoilers, por eso la estoy escribiendo luego de haber visto todos los episodios en HBOMax, pero empecemos tranqui, con una opinión general apta para todos: Este reboot no fue hecho para mí. 

Llegué a SATC por el fanatismo de un amigo, que no paraba de insistirme que la vea, y tanto va el cántaro a la fuente que al final me terminé enamorando de cada uno de estos personajes en los que encontraba siempre un poquito de mí. Es que existe un capítulo de Sex And The City para cada situación de la vida, y es imposible no verse reflejada y comprendida por Carrie, Charlotte, Miranda y Samantha, estas mujeres independientes, sensibles y fuertes que enfrentan al mundo con su amistad como escudo, que se permiten cometer errores y caerse porque saben que tienen "dos o tres amigas que están a su lado". Me identificaba con ellas porque tenía 15 o 20 y no las veía tan alejadas de mí, ellas también estaban confundidas como yo, así que a lo mejor yo también podía ser exitosa y genial en el futuro. Ahora que tengo CASI 30, me siento más parte aún de ese grupo de amigas, y estaba desesperada por saber como siguieron las vidas de estas avasallantes mujeres. El reboot era la oportunidad para espiar en sus vidas, el problema fue que yo no estoy lista para encontrarme cara a cara con el futuro, para querer empatizar con problemas como viudez, menopausia, divorcio, hijos adolescentes y un tren que se fue pero no puedo dejar de intentar alcanzarlo.

Dicho esto vamos a darle duro a los SPOILERS. Desde el inicio supe que retomar esta historia había sido un error, note a las chicas muy duras a la hora de actuar y de volver a encontrar la química entre ellas. Todo ese primer almuerzo se sintió forzado, y me recordó bastante a la primera temporada de SATC, aquella en la que rompían la cuarta pared y nos hablaban directamente a nosotros (CRINGE), algo así fue lo que hicieron al explicar la ausencia de Samantha. No miraron directamente a cámara, pero toda la justificación se sentía como un hilo de Twitter directo de la cuenta de Sarah Jessica Parker arrobando a Kim Cattrall. En este primer episodio nos pintan a una Sam muy diferente a lo que recordábamos, usando a Carrie como un cajero automático y luego huyendo al otro lado del mundo, ghosteándolas a todas. Really? Sam? La más badass de todas haciendo eso, perdón pero no lo compro. 

Y, siguiendo con el primer capítulo, dejando aparte las acusaciones en contra de Chris Noth que se hicieron públicas luego de grabado el episodio, CÓMO PUDIERON MATAR ASÍ A MR BIG?

Era un ícono de masculinidad (tóxica), que nos mantuvo suspirando "QUÉ HOMBRE!" por años, y su muerte es chivado tirado a un costado de la ducha. Yo se que no es en lo que queremos pensar, pero piensen en Big de SATC, diganme a que huele? a habanos y perfume importado. Ahora piensen en el Big que vemos morir: un viejo con olor a huevos. No le hicieron justicia un personaje emblemático y eso me puso muy triste. Como si todo esto fuera poco, durante el velorio hay dos mujeres diciendo casi textualmente "era un forro, no me apena su muerte", y yo se que esta es la verdadera grieta, y que esas mujeres fueron la voz de importante porción de la audiencia, sin embargo solo me trajo más confusión, cómo pretendía la serie que me sienta? Cuál era el tono que iba a tener a partir de ese momento? Me estaba adentrando en una serie dramática que iba a hablar de duelo o esperaban que me riera con ese comentario comédico? Me parece que ese problema estuvo presente durante toda la serie, mientras SATC tiene claro que su cometido es entretener, hacer reír y pasar un buen rato, And Just Like That no decide del todo lo que quiere hacer, nos hará reflexionar o nos va a hacer olvidar? Ni chicha, ni limonada. 

Los nuevos personajes existen solo para llenar la agenda de lo politicamente correcto, no se termina de desarrollar en las historias de ninguno de ellxs. Me quedé con ganas de un cierre más profundo para el personaje de Nya, o el desarrollo de un conflicto en la vida de Lisa. Están solo para llenar el espacio vació que dejó Samantha, pero tal como lo dijo Alberto Cortez  "Cuando un amigo se va, queda un espacio vacío, que no lo puede llenar la llegada de otro amigo"
Incluso los personajes de lxs hijxs de las protagonistas están para dar el presente y nada más, a Rock (Rose) es al que más relevancia se le da, y es muy interesante ver la reacción de Charlotte frente a esta problemática de su hijx no sientiendose representadx por su sexo biológico, termina siendo poco trascendente. No hay un dialogo que represente la importancia y la seriedad con la que un tema así tiene que ser tratado. PERO UN HURRA POR CHARLOTTE POR SER UNA MADRE DE DIEZ!  

Respecto a Miranda y Steve quiero usar este espacio simplemente para llorar. La muerte de esa relación es más trágica que la muerte de Big. Arruinaron a Steve, convirtiéndolo en un señor aburrido que solo come postres y mira tele, y se olvidó de como hacerle sentir placer a una mujer, ✨TRAGIC✨. 

Y con Miranda, me pregunto si los guionistas estaban bajo el efecto de sustancias cuando escribieron el arco del personaje. Miranda Hobbes, empoderada, decidida, apasionada por su carrera, racional por sobre todas las cosas, pierde completamente la cabeza por que unx latinoirlandesx sabe usar los dedos, c'mon people.

ENCIMA LITERALMENTE SE CAGA EN TODO LO QUE SIEMPRE DIJO Y SE VUELVE A TEÑIR, PORQUE LO QUE IMPORTA ES EL AMOR, EL AMOR QUEER QUE NOS HARÁ QUEDAR COMO QUE EVOLUCIONAMOS. 


En el último capítulo se repite lo que pasó en el primero, esta vez para justificar a Miranda. Se arma una conversación entre Carrie y Miranda en el que se explica por qué ella está tomando esta decisión a pesar de que es completamente opuesto a toda la personalidad que le habían construido a lo largo de todas las temporadas de SATC y sus películas. 

Mi capítulo favorito fue el tercero, en el que hace una aparición Natasha. Fue el único capítulo en el que pude reconocer a Sex And The City dentro de este reboot, pude ver a las chicas de siempre equivocándose, acompañándose.

Por último, se que no hablé mucho de Carrie, pero Carrie sigue siendo Carrie, algo egolatra, algo egoísta. Su personaje es el que lleva la historia, como siempre, pero en And Just Like That se marca mucho más.  Carrie es la única que cierra su historia, tiene su nudo y su desenlace feliz.

Obviamente siempre que un producto haya dado sus frutos ($$$) hay posibilidad de una segunda temporada, por el momento yo no vi nada confirmado, pero mi deseo es que no se confirme And Just Like That hacer de cuenta que estos diez capítulos ocurrieron en una realidad alternativa.  







sábado, 27 de noviembre de 2021

Encanto (Jared Bush, 2021)


La 60º película de Walt Disney Animation Studios llegó a los cines repleta de canciones que nos hacen bailar, cantar y emocionar; con colores vibrantes que logran transmitir calidez, vida, y magia (shame on you Raya y el último dragón)
Encanto nos cuenta la historia de los Madrigal, una familia mágica en la que cada integrante, descendiente directo de Abuela Alma, es bendecido con un don que deberá poner al servicio de la comunidad.

Nuestra protagonista, Mirabel, es la única que, como diría Anna (Frozen, 2013), es completamente ordinaria y esto la hace sentir constantemente inferior a toda su familia, y en especial sus hermanas, razón por la cuál busca incansablemente un poco de reconocimiento y enorgullecer a su abuela, con quien solía tener un vinculo muy cercano.
Si son de Argentina y están familiarizados con el dúo Pimpinela, y más específicamente con su canción "La familia", esta cinta retrata a la perfección la dinámica descripta por Lucía y Joaquín en esa entrañable letra. Es un despelote hermoso de personajes, con personalidades muy estridentes y disimiles entre sí que a pesar de todo se apoyan. Es interesante que por este "encanto" que le fue concedido a Alma todos carguen con tanto sobre su espalda y teman mostrarse vulnerables con sus pares, y que, justamente, sea este afán por mantenerse fuertes y perfectos lo que empiece a quebrantar los cimientos de Casita.


Casita es un personaje más de la peli y es un poco quién ocupa el lugar de mascota acompañante de Mirabel, entre ellas hay una conexión muy fuerte y especial desde el arranque del film.
En general me gustó mucho la peli, pero siento que me faltó más aventura, me decepcionó un poco que todo se desarrollara dentro de Casita, me quedé esperando que pase algo más pero eso nunca llegó. Hay muchos personajes y no profundizamos mucho en ninguno, todo se resume en una canción, así es como nos presentan a los Madrigal, y así es como se resuelven los conflictos, YENDO A TOMAR CLASES DE CANTO.


De cualquier forma, no puedo dejar de cantar los TEMAZOS que compuso Lin-Manuel Miranda. DE QUÉ PLANETA VINISTE, CHABÓN? Son pegadizas y hacen un muy buen trabajo de storytelling. La canción de Luisa no se si es mi fav o es la que menos me gusta, pero es la que más desentona en el soundtrack, A PESAR DE ESTO RE MIL ESTOY PARA QUE LIN MANUEL HAGA UN MUSICAL ENTERO EN BROADWAY SOBRE LUISA CON TEMAS EN ESE RITMO


Los acontecimientos transcurren en Colombia, y el país está bien representado, pero para poder decir esto tuve que ir a buscar referencias puntuales de El Eje Cafetero. No se si está bueno que para entender las referencias a Colombia tenga que googlear. En esta misma línea, el conflicto que hace que Abuela Alma y Abuelo Pedro tengan que salir de su casa con los trillizos es confuso, y bastante tiempo después me enteré que el suceso se trataba de los desplazamientos forzados que acontecieron en Colombia. Me hubiera gustado más contexto de esto dentro del largometraje.


Mi puntuación para la peli es un 3.5/5

lunes, 7 de octubre de 2019

“QUEDATE CONMIGO, LUCAS” (Pablo Picotto, 2019)



Lucas y Alex se hacen amigos en el arenero del jardín de infantes y no pueden parar de hablar sobre la adicción al chupete, las madres barriendo en tetas, los viejos congelados en cajones, el sabor sibarita de la pelusa del ombligo, el llanto como modo de conseguir favores. Es decir... ¡la vida misma!
¿Cómo sería la charla entre dos nenes de cinco años si manejaran todo el lenguaje? «Quedate conmigo, Lucas» es la respuesta a esa pregunta. Y también es la nueva obra de teatro del autor de «Más respeto que soy tu madre».
Mellera y Lauriente pegan un salto bestia en su carrera de comediantes de stand-up y le ponen el cuerpo a un ejercicio teatral complejo, con diálogos trepidantes y un humor corrosivo en el que, además, hay espacio para emocionarnos con nuestra infancia perdida; todo bajo la dirección de Pablo Picotto.

Desde que me enteré que Lucho y Lucas iban a hacer esta obra se me rompió el medidor del hype. Conforme se acercaba la fecha de estreno, mi ansiedad por verlos representar a Lucas y Alex crecía de forma directamente proporcional a mi miedo de decepcionarme.
Historieta de Alex y Lucas. Orsai Nº1.
Ilustración de Bernardo Erlich
Conozco la historia de estos niños mercedinos de 5 años a través de distintos formatos. Mi primer contacto con ellos fue por las narraciones radiales que hacía Hernán para Vorterix y, mediante la voz modificada del autor y los diálogos que mantenían estos peculiares personajes, logré imaginarlos completamente. Seguí con la lectura de la versión extendida de los cuentos que se encuentran en el blog de Casciari; finalmente ví la obra de 15 min. que se presentó el año pasado en el ciclo de microteatro. La trama no tiene ningún misterio para mí, y por lo mismo, a pesar de estar muy emocionada por conocer una nueva dimensión de la misma, me asustaba que me aburriera.
Admito también que, aunque celebro la asunción de nuevos desafíos artísticos por parte de Luciano y Lucas, no sabía qué esperar de ellos como actores de un texto ajeno.
Por todo esto, la espera del estreno me tenía llena de incertidumbre, felicidad, nerviosismo y, sobre todo, muy manija.

Una semana antes del estreno tuve la oportunidad de ir a un ensayo con público o preestreno, lo cual me tomó completamente de sorpresa porque me había preparado mentalmente para verlos recién el 9 de octubre.
Cuando entramos a la sala lo primero que noté fue la escenografía, que todos los viernes que hacen Stand Up en esa misma sala consta solamente de un banquito de madera, esta vez se podían ver bloques de lego gigantes repartidos por todo el escenario, y  me hizo caer realmente en que por primera vez no estaba yendo a ver a Lucho Mellera y Lucas Lauriente, sino a Alex y Lucas. Lo segundo que me llamó la atención y que también sirvió para contextualizar lo que íbamos a ver fue la música que sonaba mientras esperábamos que empezara la obra, canciones de María Elena Walsh en versión rock (posiblemente Rock&Walsh), no imagino una banda sonora más apropiada porque condensa a la perfección el espíritu de los protagonistas.
Subió al escenario Pablo Picotto, el director de “Quedate conmigo, Lucas” y nos contó que ya estaba empezar la función, que la disfrutemos pero que no olvidemos que era un ensayo.
De pronto bajan las luces y las canciones infantiles son sustituidas por un mensaje del mismísimo Hernán Casciari pidiéndonos entender a Lucas y Alex como lo que son, dos niños de 5 años, desactivar un rato la moral y disfrutar la función. Y así, por fin, aparecen en escena los personajes que tanto leí y escuché.
En el transcurrir de las escenas, Luciano y Lucas se apropian de todo el escenario, juegan con los elementos de la escenografía y cambian de vestuario; además supieron resolver y disimular situaciones imprevistas, todo esto manteniendo constantemente el personaje. Pude darme cuenta que cada acto tenía un espacio determinado, no obstante se aprovechó la versatilidad de los legos para transformar algunos lugares y avanzar temporalmente de manera análoga a los cuentos.
Lucho y Lucas son Lucas y Alex, y tal vez en eso radica la fluidez y la autenticidad que transmite. Yo puedo imaginarme con mucha facilidad a versiones mini de estos comediantes cuestionándose, de la misma forma que los personajes a los que interpretan, acerca de las vicisitudes de la vida en el arenero.
Igual que con la mayoría de los clásicos de Disney, de los cuales puedo recitar de memoria sus diálogos, sabía perfectamente a qué cuento pertenecía cada escena y qué iba a suceder, así como también sabía perfectamente cómo iba a terminar. Sin embargo mi risa durante toda la obra y mi emoción al final fueron genuinas, lograron que conecte desde otro lado con los personajes y que la historia de estos dos niños mercedinos signifique algo completamente distinto a lo que había significado durante todos estos años de conocerla.
El disclaimer de Casciari al principio del espectáculo me pareció sumamente acertado porque los cuentos fueron escritos por él en el 2004, todos éramos distintos hace 15 años, todos crecimos desde ese entonces, y porque es cierto que Lucas y Alex son niños de 5 años. A pesar de esto hubo cambios significativos en el discurso de los personajes, y aunque yo le hice caso a autor y puse mi moralidad en modo avión, los agradecí muchísimo.
“Quedate conmigo, Lucas” se estrena el miércoles 9 de octubre a las 21hs, y va a estar todos los miércoles a las 21hs en el Paseo La Plaza, las entradas se consiguen por Plateanet o en boletería. No se pierdan de ver esta obra que te deja recalculando las emociones, vale mucho la pena.

4/5

domingo, 21 de julio de 2019

El Rey León (Jon Favreau, 2019)


Parece ser que Disney se re copó con los Live-Actions. Era una joda y re quedó, pero algunos, Walt (ah, re que le hablaba a Walt como si no estuviera en un freezer), no se están riendo tanto.
Para muchos, El Rey León es una de las películas cuya huella nos resulta imposible de borrar debido a su alto contenido traumático, y esto me lleva a preguntarme ¿REALMENTE NECESITABAMOS PASAR DE NUEVO POR ESTO? ¿Acaso fueron insuficientes las lágrimas que derramamos en el 94’? ¿Hay algún tipo de universo paralelo que obtiene energía a partir de nuestro llanto?, y por último ¿merecen nuestros sobrinos pasar por el mismo sufrimiento que nosotros? Evidentemente la respuesta a todas esas preguntas es HELL, YES.
Debo confesar que yo no soy una gran fan de esta historia y que esta remake no me encantó demasiado la primera vez que la ví. Me pareció que el hacerla tan realista y sacarle a los personajes la expresividad facial humana era una gran pérdida para la trama, por lo tanto busqué reconfortarme viendo la película original de 1994, y fue en ese contraste en el que entendí por qué el mundo necesitaba este live action.
La cinta original, con todo el amor en que la envolvimos durante 25 años, era perfecta para nuestra infancia, sus llamativos colores y exagerada expresión corporal ayudaban a que niños de 4 o 5 años no quisieran salir corriendo y llorando de la sala de cine; en 2019, siendo espectadores un poco más serios, El Rey León vuelve desde el fondo de una caja llena de VHS's viejos para probar tu madurez y mostrarte cuánto hemos envejecido.
Es realista, y es verdad que en algunos momentos sentí que estaba viendo un documental de Disney Nature y no el retelling de este entrañable clásico infantil noventero; pero también es cierto que un cuarto de siglo después nos encontramos con escenas que tienen muchísimo más peso y significado que en el film animado, y eso se agradece mucho. Se pierde mucho con la falta de humanización de los personajes, sí. Pero hay una ganancia muy grande en la intimidad que se construye a partir de las mirada, y la profundidad y matices de emociones que podemos notar dentro de ese minimalismo. 
El Rey León 2019 respeta a raja tabla la esencia de su predecesora con diálogos y momentos idénticos al 100%, sin embargo incluye este plus, cada línea está signada por una gran carga significativa. Llega a ser realmente sombría y dramática, a tal punto que se agradecen los alivios humorísticos que aportan Zazú, Timón, Pumba y hasta las hienas.
La fotografía de la película es un capítulo aparte, me tuvo conteniendo la respiración desde el minuto cero, los paisajes bellísimos y unos cielos increíbles me hicieron volver a creer en la magia de la naturaleza.
A pesar de no haber tenido una buena primera impresión, El Rey León creció en mí y no puedo esperar para volver a verla. Sin embargo no creo que apunte a un público infantil como la versión animada, este live action se toma el drama mucho más en serio, y tengo la sensación de que fue pensada para que quienes fuimos niños en el 94 podamos disfrutar una experiencia más acorde a nuestra edad.
75/100


EDIT/DISCLAIMER: Tenemos que dejar de juzgar a los live actions que está haciendo Disney con nuestros pijamas de Mickey puestos y llenos de mocos. Siento que aunque juguemos a separarnos de nuestra melancolía a la hora de escribir la crítica, no lo logramos. Estuve con mi prima de 9 años y me dijo que había ido a ver El Rey León y le había encantado, mucho más que la original que vimos nosotros. Es un infantil, bastante más maduro y comprometido con el mensaje que quiere llevar, y funciona muy bien con los niños y niñas del 2019. 


**La crítica original, también escrita por mí, está publicada en http://cineconestilo.com 
Vayan a visitar el sitio que tiene muchisimas criticas y recomendaciones de pelis, estoy segura que les va a gustar. 

martes, 16 de julio de 2019

Hurts 2B Human

CRÍTICA “HURTS 2B HUMAN”, P!NK (2019)

Hurts 2B Human entró en mis favoritos desde que escuché el track 9, pero la historia del disco empieza antes, con la salida de los cuatro sencillos que adelantaban la temática del álbum y que me dieron indicios de lo mucho que me iban a gustar el resto de las canciones.
Toda la discografía de P!nk, pero particularmente este LP que me interpeló tanto como para ponerlo en mi lista de favoritos a solo un mes de su lanzamiento, hacen que venir de una familia disfuncional, con un padre ausente y mis mil inseguridades cobren sentido y se hagan arte en las letras y en la voz de Alecia Moore.
Hurts 2B Human es un viaje solitario de ruta hacia el campo. La excursión comienza con Hustle, el segundo single pero la primera canción que encontramos cuando apretamos play, es la motivación que tenemos para manejar lejos de casa. Quiero cantar esta canción con el corazón roto, las ventanillas bajas y el viento pegándome en la cara “Live my life like a bullet in a gun” “Bitch, please, don’t try to hustle me”; te di mi corazón, no lo valoraste y ahora es muy tarde para arrepentimientos.
Paro en una estación de servicio a cargar nafta, con los auriculares puestos entro al kiosco y canto mientras agarro chocolates “Hey why you fucked up my life, hey why do I miss you sometime?”, la letra habla de un tipo de amor muy fresco, muy de los primeros amores, despreocupado y al mismo tiempo de la finalización de ese amor, de cuán difícil es terminarlo a pesar de las cosas malas. Podría ser una balada tristísima, sin embargo es de las canciones más divertidas del álbum, necesito bailarla entre góndolas mientras elijo golosinas para olvidar el desamor, bailarla y cantarla mientras cargo nafta y me preparo para seguir.
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Empieza a sonar Walk me home y pienso, en medio de mi soledad, en todas las personas que me acompañan a través de la oscuridad cuando afuera está todo mal, y aunque este viaje de autodescubrimiento sea mejor hacerlo sola, se que a la vuelta sigo teniendo personas a las que puedo llamar hogar. La canción no tiene un ritmo melancólico y sin embargo lloro reconfortada en el recuerdo del amor.


Lentamente vamos entrando en el corazón de este álbum y nos encontramos con letras íntimas, profundas y con melodías que acompañan el decir de las canciones. Escucho My attic, de repente tengo 14 años otra vez, ya no estoy en un auto manejando sola e independiente, estoy en mi habitación de paredes rosas llenas de posters, escribiendo acerca de mis sentimientos, escribiendo acerca de cosas que quisiera que todos entiendan pero que jamás dejaré que lean. Con tantas cosas para decir y con tanto miedo de ser escuchada, mi ático es aquel lugar donde me escondo con todos mis fantasmas y mis demonios, es aquel lugar que quiero compartir para que sea menos frío y menos tenebroso, pero me asusta que si dejo a alguien entrar lo ahuyente más. Mi ático es un lugar en el que solo soy vulnerabilidad.
90 days por su parte es LA balada de amor del disco, es un dúo con Wrabel, tiene un videoclip que estrenó en junio en el que se ve reflejado a la perfección todo lo que me transmitió al escucharla: Dolor y desesperación por sentirte atrapade en la monotonía de una relación que ya no es lo que era. No hay nada distinto, los dos siguen fingiendo, mas el amor que se tuvieron en un momento, ya no está. Siento ahogo y temor de que por salvarme este hundiendo a alguien más. Tiene sonidos robóticos y algo distorsionados que colaboran con esa atmósfera de no estar en la misma sintonía, de no entenderse, de buscarse, algo así como un laberinto lleno de interferencias.
Hurts 2B Human, el tema que le da título al disco es un poco la continuación de Walk me home, se siente algo de lamento en la voz de P!nk porque duele ser humano con todos estos pensamientos enroscándonos y todo lo que nos pasa constantemente, sin embargo hay notas de optimismo porque a pesar de todo no estoy sola, alguien me acompaña, me apuntala.
Con un sonido que se asemeja al producido por Coldplay en Mylo Xyloto (2011), Can We Pretend mira con nostalgia cierta etapa de la vida y propone fingir que volvemos a vivirla mientras saltamos como si estuviéramos en un concierto de la ya mencionada banda británica, haciendo brillar nuestras Xylobands.


Los issues de P!nk somos todos, y en Courage reflexiona sobre mí misma, volviendo a hacerme sentir muy identificada, casi como si yo hubiese coescrito junto a Sia esta canción, “Have I the courage to change?”
Mientras sigo manejando sola, la música suena pero también suena mi cabeza y no sé si es P!nk cantando una nueva canción o leyendo directamente mis pensamientos con una melodía de fondo. Como adelanté al principio, la razón por la que estoy escribiendo esto es el track 09 y finalmente llegamos: Happy. Vuelvo al ático, a mi habitación, a mi tristeza de adolescente, la cual probablemente no está tan superada como creía antes de escuchar esta canción. Inseguridades, miedo, autoboicot, una guitarra, la voz suave y grave de Alecia “Seen every therapist but I’m a cynical bitch, don’t like to talk about my feelings”. Siempre escondiéndome, siempre con temor a la exposición, siempre esperando que algo salga mal, nunca disfrutando del ahora.
Quiero explícita mi posición de ignorar completamente el track 10 porque no me gustó y quisiera que ese fuera el bonus track japonés y no More que es una canción muy bella, pero así son las cosas.
Otra balada, otro dúo, una gran súplica de amor, Love me anyway. Esos agudos durante todo el tema… “Sí, P!nk, te voy a amar a pesar de cualquier cosa pero por fa no llores”. Hay mucha gente a la que le hubiese pedido lo mismo, y mucha más a la que se lo pido. Soy un desastre pero ¿podés coparte y amarme a pesar del desastre que soy y de los desastres que haré?
Casi llegando al final está Circle game, hablando del crecimiento de lo doloroso y difícil de tener que madurar y ocupar otros roles. Esta vez un piano acompaña el llanto, estaciono a un costado de la ruta y con la cara apoyada en el volante dejo que las lágrimas que trate de contener durante todo el viaje salgan libres. Soy mi yo de 10, de 14, de 17, de 22 años, crecí y maduré pero también está bien ser vulnerable con casi 30 años o en el caso de P!nk con 39.
La última canción de tu vida (The last song of your life) es la que finaliza el disco, muy original un titulo como ese para terminar el recorrido, sin embargo no habla de un final sino que es una invitación a la autenticidad, a las experiencias, al aprendizaje, una invitación a darnos una oportunidad de exponernos y descubrir que es que el o les otres nos devuelven.
Amé con pasión desbordada Hurts 2B Human, en primer lugar porque ese titulo habla de cómo me siento yo misma acerca de esta humanidad. Pero también por la manera en la que esta diva pop comercial de los 2000’s con pensamientos oscuros que rompió con el estereotipo al que Britney nos tenía acostumbrados, hace arte con todas nuestras imperfecciones, temores y pedazos de nuestros corazones.
Este es el octavo disco de estudio de la artista y fue lanzado el 26 de abril de 2019.

Crónica: Lucho Mellera “Cumpleañitos en el Maipo”



El aniversario de Lucho Mellera como comediante es en noviembre, en 2018 su carrera cumplió 10 años y por este motivo organizó un show en el Maipo para celebrarlo.
Anticipa la celebración a través de un tweet la noche del 14 de noviembre y desde ese momento, con muy poca info, ya me pongo manija.
Soy fan de Luciano desde que vi su participación en TEDx Jóven 2011, que descubrí en 2013 junto a otras charlas TEDx. Me gusta su humor porque es un poco más rebuscado de lo que estamos acostumbrados a ver, cuando cuenta sus historias, sus chistes, no solo me río por la buena construcción de los remates sino que a través de su narrativa me siento tan incluida en el relato que me imagino siendo él, con su lógica y viviendo esas mismas situaciones. También admiro su capacidad para la escritura de sus guiones de humor y cómo sube la vara con su público al elaborar monólogos en los que roza lo literario y se permite incluir, por ejemplo, una estructura de relato circular. 
El 24 de noviembre, diez días después del primer tweet, anunció en un post de Instagram la fecha y el lugar de su Cumpleañitos. Al leerlo me sentí desbordada de felicidad, por fin iba a poder disfrutar en vivo los chistes que había visto una y otra vez en sus videos de Youtube, hasta que caí y me acordé que el 13 de diciembre me había comprometido con una amiga para acompañarla al recital de Tini Stoessel, que estaba previsto para el 1 de diciembre, pero debido al G20 lo reprogramaron haciéndolo coincidir con el evento perfecto para cerrar mi 2018.
Diecinueve días y una pelea con mi amiga después, días durante los que intenté encontrar una forma de estar en dos lugares a la vez sin éxito alguno, llegó el 13 de diciembre. No sabía que en diciembre podía llover tanto, y a pesar de haber tomado la decisión de ir al show de Luciano la noche anterior, volvía a poner en duda mi asistencia al show.
Afortunadamente el clima mejoró y, junto a la amiga que me acompañó, pudimos tomarnos el transporte público hacia el Teatro Maipo. Llegamos a las 21:20 a la puerta del teatro y nos encontramos con una cola de casi una cuadra para entrar a la sala, nosotras primero teníamos que retirar nuestras entradas y después encontrarnos con otra amiga más que estaba atrasada en el subte, la función empezaba 21:30.
Mientras nos dirigíamos a la boletería veo a César Silveyra, quien fue orador de una charla TEDx en 2016 y rapeó junto a Lucho el cierre de la TEDx de ese año, uno de mis cierres favoritos porque a pesar de ser no ser cantante sino comediante, fue muy divertido lo que hicieron juntos; empecé a saltar de emoción ante la posibilidad de que hicieran algo así esa noche y a desesperarme por descubrir todas las sorpresas que habría preparado Luciano para festejar su cumpleañitos standupero.
21:30 abren las puertas, lentamente la cola desaparece y todxs entran al teatro. Jujuy, nuestra amiga, sigue sin aparecer y no sabemos que hacer porque no estamos interesadas en perdernos ni un minuto del cumpleañitos. Decidimos dejar su entrada con el acomodador y entrar sin ella.
Cuando ingresamos a la sala nos guían hasta nuestras butacas y una vez allí nos entregan junto al programa, una bolsita en la encontramos caramelos, juguetes de cotillón y un globo, todo un verdadero cumpleaños de 10.
Jujuy llegó justo a tiempo para inflar su globo y disfrutar del show. Casi al mismo tiempo entra César y se sienta unas filas más adelante que nosotras, lo que me hace entender que muy probablemente no forme parte de los artistas invitados y este solo como espectador, me decepcioné más de lo que les puedo expresar en un párrafo, por suerte enseguida empezó el show y me olvidé de mi decepción.


Igual que en 2008, la primera vez que se paró en un escenario a hacer Stand Up en la muestra de fin de año de su profesor, Fer Sanjiao apareció en el escenario para contar algunos chistes y presentar el primer bloque de humor de Luciano.
Como en muchos de los videos de esa primera época siendo comediante, Lucho nos sorprendió a todos usando la remera amarilla con la estampa ¡plop! (característico de las historietas de Condorito). En este primer bloque nos habló sobre fideos, jabones, unicornios y gustos raros, todos reímos como escolapios que escuchaban por primera vez esos chistes aunque estoy segura que los habíamos escuchado más de mil veces.
Al terminar con los chistes del primer segmento, presentó al segundo invitado sorpresa, Martín Pugliese, quien fue también docente suyo y lo ayudó a darle relevancia a la expresión corporal dentro de las rutinas de humor.

En la sala se respiraba diversión y mucha, mucha emotividad, todxs los que habíamos ido acompañamos a Luciano en su crecimiento como comediante y ese viaje en el tiempo al que nos invitó fue como ver el video del bautismo de mis sobrinos, CÓMO CRECEN LOS CHICOS #proudauntie
Para el segundo bloque uso la remera de Calculín, la de Ciudad Emergente 2012, volvimos a reír con el chiste del Vascolet y con aquel que hablaba de recrear la escena de una peli con una chica. Reí no solo porque aún sus chistes viejos me siguen pareciendo maravillosos, sino por lo mucho que cambiamos Lucho, en su rol de humorista y yo, como público, como evoluciono nuestro código de humor, nos reímos juntos de los personajes que crea en función de sus chistes.
Fernanda Metilli no podía faltar al festejo, y se sumó a homenajear a Luciano y a ella misma, ya que al ser compañeros del taller de Sanjiao se recibieron de standuperos el mismo día, y ella también cumplía 10 años con el Stand Up. Ellos además de convertirse en muy buenos amigos, se animaron a ser profes de Stand Up y formaron a standuperxs como Magalí Tajes.
¡Qué bien le quedan las camisas a Luciano Mellera! Estoy segura que no soy la única que piensa eso y el tercer segmento fue una clara prueba de eso porque al segundo en que Lucho salió al escenario con el mismo look que usó en el especial de Comedy Central, Stand Up Sin Fronteras, con camisa y corbata, una joven del público le gritó “Qué lindo que sos”, a lo que él respondió “No me cosifiques” con una sonrisa que casi hace que yo misma le quiera revolear algún piropo de Dos Corazones. En esta parte del show condensó los chistes de los especiales de Comedy Central 2013 y 2014, por lo que no tuvimos oportunidad de verlo, gracias a Jebus, con la remera naranja fosforescente que usó en el 2014.
Se acercaba el final, pero no sin antes contar con la presencia del señor Lauriente sobre el escenario. Siento, cuando presenta a Lucas, que por primera vez está siendo real, él, que siempre dijo cuanto le molesta la gente y lo cabrón que es, estaba compartiendo genuinamente su emoción por haber logrado dejar de laburar en la oficina con todxs nosotrxs. Nos cuenta acerca de lo maravilloso que es trabajar de lo que uno ama y poder divertirse haciéndolo, y cuan inconmensurablemente mejor es poder compartirlo con su mejor amigo. No sé si fue real o me lo inventé, pero cuando lo escuché decir esas cosas tan tiernas en mi cabeza sonó un AWWWWWW.
Lucas hizo la rutina que suele hacer en Mellera Lauriente, y dio inicio a la última parte de este mágico cumpleañitos. Cuando Luciano salió nuevamente al escenario, en la que sería la última entrada de la noche, lo hizo con la ropa con la que se lo suele ver en los shows actuales que hace en Paseo La Plaza y en las giras.
Cuando terminó de hacernos reír, se puso serio y algo solemne y nos agradeció por estar, por haber ido a celebrar con él; nos contó que estaba su familia y los señaló en la platea, a ellos les agradeció especialmente por nunca dudar de él y no cuestionar el que se dedicase a la comedia. También le agradeció a su hermano, y nos dijo que en realidad era Joan la persona más divertida que conocía, incluso más que él mismo. Por último, felicitó a su novia y pidió un fuerte aplauso para ella por haberse recibido el día anterior.
Luego de esto subieron nuevamente al escenario, con una torta y serpentina, todxs lxs invitadxs, y todxs juntxs entonamos las estrofas del FELIZ CUMPLEAÑOS. Finalmente, antes de que nos fueran a buscar a todxs nuestras madres, nos sacamos una foto grupal con el cumpleañero y se bajó el telón.

A la salida algunas personas nos quedamos a esperar a Luciano para felicitarlo por estos diez años, y yo, además, porque durante la lluvia tuve un attackazo artístico y le arme un regalo, muy al estilo los 90’ que consistía en emular una caja de perfume Paco, pero en vez de Paco estaba Lucho y en vez de perfume, tenía golosinas.
Ya había interactuado varias veces con Luciano, pero sin duda esta fue la mejor de todas las veces. Cuando vió la caja que le armé me dijo “Woow, no sabía que lo necesitaba hasta ahora que lo estoy viendo”, con esa expresión de niño entusiasmado, sorprendido e hiper feliz. Nunca lo había visto tan feliz. Nos saludamos, nos sacamos una foto y le pedí que me firmara la entrada, a lo que accedió de inmediato.
Mientras firmaba le pedí también, porque yo estaba ahí para aprovecharme de esa felicidad, que hagamos unas stories para instagram haciendo esos juegos de palabras que traban la lengua. Jugamos y reímos como si fuéramos grandes amigos y se regocijó en su triunfo cuando yo no pude repetir “¿Estás de acuerdo con la napolitanización de la milanesa?”. Me despedí de él sintiéndome muy frustrada por no poder vencerlo, pero también muy feliz por haber asistido esa noche a su cumpleañitos y ser un poquito parte de su felicidad.





miércoles, 11 de julio de 2018

Hola de nuevo|| Luciano Mellera: Infantiloide

Holaa queridas 48 personas que siguen mi blog, acaso ya no se usan los blogs? Probablemente no.
Me gustaría, por alguna razón que no comprendo, volver a escribir reseñas sobre cosas que me gustaron; ya no serían exclusivamente de libros porque últimamente estoy leyendo muy poco, pero sí de alguna peli, serie o especial de stand-up que me haya gustado muchísimo.
Si el viernes sigo con la idea de reseñar cosas, trataré de acordarme como se le cambiaba el diseño a esto, por ahora les voy a dejar una reseña del especial para Netflix de Luciano Mellera, solo porque personalmente estoy bastante conforme con lo que escribí para las reseñas de Netflix.  (Puedo decir muchas veces más Netflix en una misma oración? Try me)



El argentino Luciano Mellera resalta los aspectos humorísticos y fantásticos de la niñez a través de imitaciones cómicas y reflexiones sobre la vida cotidiana



Desde el comienzo, Luciano se presenta con tres características, aunque durante el show se hace cargo solo de una de ellas; él es sin lugar a dudas: INFANTILOIDE, pero también gruñón y bastante ácido en su forma de ser, tal es así que si  tuviera que compararlo con cualquier cosa que no fuera una persona, sería con un caramelo fizz (googlear tira fizz). Como un plus a estas características es muy seductor, el resultado de tener en escena a un comediante con esas características es un show que nos conecta con nuestra parte más lúdica desde la inocencia y con un poquito de la maldad inherente a la niñez. Lucho se permite jugar y decir todo lo que piensa sin abusar de un lenguaje burdo o caer en chistes básicos, de hecho en una parte del show los espectadores festejan un chiste bastante simple y, sin embargo, efectivo, y él les pide que no aplaudan, que "suban más la vara". Es que, si bien su estilo de comedia suele relacionarse con cosas cotidianas vistas desde una perspectiva muy infantil, sus chistes son un poco más rebuscados de lo que solemos ver en estos especiales de Netflix.
Vía Instagram @luchomellera
Personalmente, lo que más disfruté de su monólogo fue un chiste con una estructura circular que me recordó muchísimo a el cuento de Julio Cortázar "La continuidad de los parques", con la diferencia que en la historia que nos cuenta Luciano no hay ningún asesinato, pero te vuela la cabeza de la misma manera. También es destacable la complicidad que mantiene constantemente con su público, y como ellos no lo abandonan en ningún momento a pesar de la acidez del comediante en varios momentos.
Un último tip que me gustaría darles para cuando vayan a ver el especial es prepárense un Vascolet y presten mucha atención porque, otro de los talentos de este joven oriundo del partido de San Martín, provincia de Buenos Aires, es conectar todas las historias que cuenta a lo largo del show y no van a querer perderse ninguna risa por estar desatentos.
Disfruto un montón de todos los standups de Lucho desde que ví el video de su participación en TEDxJóven y tal vez no estoy siendo del todo objetiva, pero si les gusta la comedia, él definitivamente merece que le den la chance de hacerlos reír.